Son muchos los tipos de celebraciones que pueden requerir de los servicios de un catering. A priori, las bodas o los eventos empresariales son los primeros que se pasan por la mente, pero también son muy adecuados para otro tipo de celebraciones como cumpleaños, bautizos, comuniones, confirmaciones o un sencillo evento en casa al que queremos dar cierto toque de distinción o para el que necesitamos despreocuparnos de la comida y su servicio. Sin embargo, para cada una de ellas el catering adecuado es diferente, no solo por la posible variedad de comensales, sino simplemente porque en cada tipo de celebración las personas esperan una clase de comida. Por ello, un catering de eventos no tiene nada que ver con un catering para una boda.
Un catering diferente para cada celebración
Cada empresa tiene ya establecido un tipo de catering adecuado para cada evento. Evidentemente, son una referencia que se puede modificar y adaptar en función de gustos o necesidades específicas.